El panda rojo, panda menor de Bután como también se le conoce, es un animal tímido, peludo y uno de los más amenazados del mundo…
Escrito por: Alberto Piernas
En los Himalayas utilizaban hace siglos la palabra “ponya” para definir a un animal come-plantas que poco después sería conocido por nosotros como panda. Uno de los animales más pacíficos y bonitos del mundo se esparce especialmente por China, siendo la especie del panda rojo la que predomina en Bután, país donde el también conocido como panda menor es la estrella.
Con un peso que oscila entre los 5 y 9 kilos y un tamaño similar al del gato cuya cola supone un añadido de hasta 46 centímetros, el panda rojo es uno los animales que más disputas ha provocado entre los expertos, ya que a pesar de proceder de una familia de omnívoros extinta, también se le incluye en la familia de los mapaches (se cree que el panda rojo también vivió en América del Norte una vez) y los osos, los dos animales que mejor definen el aspecto de este singular animal. El resultado es una apariencia que combina los colores blancos, negros y rojizos simplemente adorable.
El panda rojo mora en bosques templados, donde las temperaturas apenas superen los 25 º y se balancean en las ramas gracias a su cola anillada. A su vez, no solo comen bambú como sus hermanos negros y blancos, sino también raíces y huevos.
Por desgracia, el hombre parece seguir empeñándose en que animales como el panda rojo vean disminuir su especie debido a la caza furtiva o la tala de árboles. Por este motivo sólo quedan 10 mil ejemplares de este animal, siendo incluido en la lista de Especies en Grave Peligro de Extinción por organizaciones como la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) o WWF. A ello habría que sumar la presencia del panda rojo como reclamo exótico en los zoológicos de Occidente.
Para quienes busquéis visitar al panda rojo en libertad, y siempre respetando su entorno, el corazón de Bután y sus bosques templados son las zonas más apropiadas, siendo las áreas montañosas y parques de Thrumshingla y Jigme Dorji las más indicadas para avistarlo. Aunque el panda rojo también habita en otros países vecinos como Burma, China, Bangladesh o Nepal, Bután es el lugar con mayor número de pandas menores de toda Asia.
El panda rojo, panda menor de Bután para muchos, es uno de los animales más adorables del sudeste asiático pero también uno de los más amenazados. Por este motivo, conviene ser precavido a la hora de respetar su hábitat, optar por el ecoturismo en Bután como vía y arriesgarse a que, quizás, esta peluda criatura trepe por tu cuerpo en busca de alimento.
Respetemos el medio ambiente y optemos por realizar turismo ecológico cuando visitemos cualquier país, especialmente aquellos donde su naturaleza es tan variada que dejar pisadas verdes tras nosotros se convierta en un requisito más.
¿Te llevamos a ver el panda rojo?