Ajjchan
En el Día de la Mujer Rural, rendimos homenaje a todas las mujeres del mundo pero, especialmente, a las de un país indio cuyas dificultades y logros en la era moderna continúan siendo motivo de reflexión.
Escrito por: Alberto Piernas
Querida mujer rural de India:
Puede que seas de Kerala o de Gujarat. De Anantapur o de Bengala. Pero sabemos que la vida no ha sido fácil, especialmente cuando eres una mujer rural en territorio indio. Sabemos que, de los más de 1300 millones de habitantes que tiene India, sois un gran número y, quizás por ello, aún queden muchos favores por devolveros, especialmente en un momento como el actual.
Durante estos últimos meses, os hemos visto haciendo grafitis en las paredes para alertar a vuestros vecinos de la presencia de un enemigo invisible que no sabemos cuando se marchará. Repartiendo alimentos entre personas que solo tenían las hojas de los árboles para comer. Cultivando los arados de arroz y de mango bajo los ojos de Sita, la esposa de Ramayana que una vez también nació entre los surcos de las cosechas.
Pero, especialmente, somos conscientes de vuestra realidad. De siglos de sacrificio (literales y no tanto), de tener que soportar la presión social de quienes os han dicho que sois inferiores al hombre a través de costumbres aún arcaicas como la dote o, incluso, el matrimonio infantil en muchas de las áreas de India. De quemar vuestra piel bajo las canículas o vaciar vuestras casas hechas de caña y palma tras las inundaciones de los monzones. De aceptar la negativa ante el resultado de una ecografía para no acudir a un pozo perdido a silenciar el destino. Del silencio en la puerta de un templo donde, entre velas y miradas, habláis lenguajes secretos, tan solo conocidos por los dioses de vuestros ancestros.
Por suerte, no todo es negativo y eso es gracias a vosotras. Durante estos últimos meses hemos visto iniciativas que confirman que andáis, incluso levitáis, por el mejor de los caminos. Hemos visto a mujeres de zonas empobrecidas conduciendo, tan valientes como seguras, tuk tuks entre los palacios rosas de Jaipur. Mujeres que comenzaron limpiando los establos de hoteles que hoy dirigen. Sonriendo, orgullosas, por las hijas que fueron a la universidad y dibujan nuevas promesas a las futuras generaciones. Desarrollando aplicaciones que velen por la seguridad de otras mujeres o sirviendo crujientes thalis en casas rodantes por toda Kerala. A mujeres empoderadas que han salido a las calles con pancartas como llamamiento a desnudar tantas voces silenciadas.
Hoy, más que nunca, tenemos la deuda de devolveros el mundo que os pertenece.
Namaste.
© Fundación Vicente Ferrer.
Sociedad Geográfica de las Indias colabora directa e indirectamente con la mujer rural en India a través de diferentes iniciativas y valores. Además de la colaboración con las ONGs Sonrisas de Bombay y Mobile Creches, enfocada en la nutrición, sanidad y educación de miles de niños y niñas de India, nuestra cadena de servicios involucra a cientos de personas y sus familias sin fomentar los negocios ilegítimos ni, por supuesto, la explotación.