En el corazón del místico estado de Kerala encontramos la llave para visitar sus famosos backwaters. ¿Su nombre? La exuberante ciudad de Kottayam.
Escrito por: Alberto Piernas
Existe un lugar donde cientos de aves tropicales surcan tapices verdes, casi infinitos, hasta fundirse con el mar. Hombres camuflados en la naturaleza que le hacen cosquillas a los cocoteros y un niño que nada en un canal rodeado de cientos de patos. Quien visita el estado de Kerala, al sur de India, se sumerge en un multiverso paralelo y fragante, no sabemos si por capricho de las deidades – a este estado se la conoce como Tierra de Dios -, su poso cultural, o la presencia de los backwaters.
Este conjunto de 900 km de lagos, canales y ríos discurre por el interior del estado y regala historias y experiencias para la eternidad. Sin embargo, antes de tomar asiento – o dormir en un kettuvalam, o antiguo barco arrocero – cabe preguntarse dónde disfrutar de todos los encantos de la zona antes de tomar el primer barco. Puede ser en Alleppey o en Kottayam, una de las puertas de entrada a los backwaters de Kerala.
Kottayam: todos los caminos conducen al agua
Rodeado de bastos arrozales y el lago Vembanad, Kottayam es una ciudad que parece flotar sobre el paraíso. Quizás porque se encuentra a tan solo 3 metros sobre el nivel del mar, en el delta del río Meenachil. En Kottayam aún se perciben los ecos de un tiempo en que el reino de los Thekkumkur gobernaba en torno a una fortaleza. Sería siglos después cuando la presencia de portugueses y holandeses permitiría la exportación de especias, dejando un poso de ermitas coloniales hoy perdidas en mitad del trópico.
A lo lejos se escucha el canto de las aves tropicales y alguien lee el periódico bajo una palmera. Es la estampa insignia de la también conocida como «ciudad de las cartas«. Y es que la mayoría de dominicales de Kerala nacieron en esta ciudad mencionada en tantos poemas como en la obra magna de Arundhati Roy, El dios de las pequeñas cosas, publicada en 1997.
Caminar por las calles de Kottayam implica una visita antes de poner un pie en sus maravillas flotantes: ahí tenemos el templo de Thirunakkara Mahadeva, de carácter hindú y uno de los principales lugares de culto de la ciudad. Construido por los miembros del reino de Thekkumkoor hace más de quinientos años, el templo está dedicado a Shiva y cuenta con un techo triangular. Esta estructura típica está presente en muchas viviendas de Kerala debido a las abundantes lluvias de la zona.
Algo más adelante también encontrarás la mezquita de Juma Masjid, o el Poonjar Palace, ejemplo de elegancia y arquitectura keralense.
Aunque la ciudad de Kottayam engloba diversas atracciones a visitar, son sus alrededores los que realmente se llevan todas las miradas: pueblos recónditos, reservas de aves e iglesias perdidas revelan un mapa tropical desordenado y misterioso, ideal de explorar durante toda la jornada.
Si te gusta la naturaleza, no puedes perderte una visita al Kumarakom Bird Sanctuary (15 km de Kottayam) y situado junto al lago Vembanad, donde tomarás el barco por los canales. En este paraíso podrás realizar birdwatching y apreciar garcillas, pavos reales, flamencos y cientos de aves migratorias. El faro de Monroe asomando desde el pueblecito de Pallom (8 km de Kottayam) y rodeado de arrozales. O las deliciosas aldeas de Nattakom y Panachikkad, con sus templos blancos envueltos por la naturaleza. ¿Y si quedas dos días?
Quizás también visites Kottayam en septiembre, época en la que los nenúfares crecen de forma masiva en Malarikkal (8 km), pueblo que invita a dar un paseo en barca a través de cientos de rosas. Los caminos perdidos de la isla de Pathiramanal, donde los niños se funden con la naturaleza y alguien aguarda al taxi acuático junto al canal.
O las cascadas de Elaveezha Poonchira, un pequeño edén rodeado por tres colinas. A lo lejos, los locales que comienzan a agolparse junto al lago Vembanad. Solo entonces comienza la aventura de los backwaters, con el trópico susurrando en tu espalda y el corazón hinchado por los sonidos del Nirvana.
Kottayam supone el perfecto remanso de paz donde hospedarte, si bien también puedes optar por un alojamiento en Fort Kochi, centro neurálgico de Kerala ubicado a 68 km. Realizar una excursión de un día es una buena alternativa antes de pasar un par de noches a bordo de un house boat, dejar atrás el mundo conocido y fundirse con todos los encantos de la Tierra de Dios.
Descubre Kerala durante tu próximo viaje a India.
Hermoso artículo. Me encanta toda esta información hermosa y útil. Muchas gracias por compartir tanto. Me encantaría visitar este increíble lugar.