A raíz de la pandemia, ha proliferado una forma de viajar enfocada al relax absoluto, en ocasiones, incluso sin salir del alojamiento. Si en tu caso, estás pensando en viajar a la antigua Ceilán, te sugerimos estos mejores hoteles-destino de Sri Lanka.
Escrito por: Alberto Piernas
Mejores hoteles-destino de Sri Lanka
Tras el impacto que supuso la pandemia mundial del COVID-19, buscamos saciar nuestra sed de viaje a través de los llamados ‘viajes de venganza». Queríamos viajar, descubrir, explorar todas las serendipias pendientes. Sin embargo, a medida que han pasado los meses, tal saturación hedonista también ha desembocado en un cierto anhelo por parte del viajero a la hora de consolidar experiencias que inciten al descanso, el relax y la desconexión: desde las ya conocidas como «vacaciones de las vacaciones» o «vacaciones para no hacer nada«, el mundo despliega un sinfín de retiros, alojamientos y escenarios donde sucumbir a nuestro yo interior o, simplemente, limitarnos a descansar.
Dentro de este tipología, los llamados ‘hoteles-destino’ cada vez adquieren mayor relevancia, especialmente cuando hablamos de experimentar un total descanso y lo mejor de un nuevo país sin salir (casi) del hotel. Los siguientes hoteles-destino de Sri Lanka, bien lo confirman.
Anantara Peace Haven Tangalle Resort
Camuflado en una enorme plantación de cocos que florece en la costa sur de Sri Lanka, Anantara Peace Haven Tangalle Resort es todo lo que le pedimos a un alojamiento donde sucumbir a un total relax. Las vistas al océano Índico envuelven cada una de las ensoñadoras suites, el kilómetro cero desde el que entregarse a tranquilos paseos en bicicleta por la naturaleza, disfrutar de un cocktail en la piscina mientras los peques se divierten en el Kids Club, o saborear una cena gourmet en lo alto de un acantilado. Por estos y otros motivos, el resort ha sido reconocido por medios tan prestigiosos como Condé Nast Traveler o DestinAsian.
Jetwing Blue (Negombo)
Situado a lo largo de la exuberante costa de Negombo, Jetwing Blue es un alojamiento de lujo 5 estrellas que rezuma el encanto del prístino sur de Sri Lanka. Desde la cata de sus sabrosos mariscos hasta una tarde de shopping en sus boutiques, pasando por las dos piscinas, sus instalaciones wellness y las estupendas vistas desde la suite, Jetwing Blue supone el faro del relax ideal a la hora de explorar las playas colindantes (o quedarse admirando un atardecer eterno desde la terraza).
Amangalla (Fort Galle)
La parte antigua de Galle evoca el encanto colonial nacido de la brisa del Índico, el tropicalismo ceilandés y las influencias europeas a través de un laberinto histórico que merece ser descubierto desde el propio alojamiento. El mejor ejemplo lo encontramos en Amangalla, un resort capaz de transportarte en tiempo y espacio a través de una arquitectura amable y respetuosa, de tejas inclinadas y terrazas floridas que conversan con las comodidades de su moderno spa, una piscina para los sentidos y la joya de la corona: la suite de la esquina, con vistas envidiables de todo el panorama de Galle, incluyendo el mar, la Iglesia Holandesa Reformada y el icónico faro de la ciudad.
Kurulu Bay (Koggala Lake)
«Kurulu», o pájaro en cingalés, bautiza este hotel-boutique que abrió sus puertas en diciembre de 2022 y supone la mejor opción para lunas de miel en el exuberante lago Koggala. Un refugio ideal para desconectar a través de coquetas habitaciones con jardín, cabañas frente al lago y suites integradas en los propios árboles a fin de hacerte sentir la magia de este entorno natural privilegiado.Un festín arquitectónico que fusiona las influencias de la Florida de los 60 con el modernismo tropical para albergar clases de yoga, columpios perfumados por la selva y un restaurante cuyos sabores te elevan como ese ‘kurulu’ que nunca fue tan libre como en este oasis sostenible.
Gal Oya Lodge
A pesar de ser menos conocido que Yala – donde tampoco faltan los mejores ecolodges -, Gal Oya se ha consolidado con los años como la nueva joya sostenible de Sri Lanka gracias a su ubicación y encanto exclusivos, algo más alejado del turismo de masas. Y cuando pensamos en un alojamiento, todas las brújulas apuntan hacia Gal Oya Lodge. Nueve bungalows de teca y una villa familiar camuflados entre la maleza se convierten en perfectos miradores desde los que espiar la vida silvestre de cocodrilos, tortugas y elefantes a través de un safari, además de los encuentros con los indígenas Vedda. La cama King Size cumple la promesa de un oasis donde refugiarte en la terraza privada, disfrutar de un baño al aire libre o sucumbir a un restaurante con vistas a Monkey Mountain.
¿Te gustaría descubrir estos hoteles-destino durante tu próximo viaje a Sri Lanka?