Escrito por: Enric Donate
India siempre está de celebración. Durante todo el año se suceden las fechas señaladas y las festividades religiosas. Sin embargo, la temporada de los festivales en el norte de India empieza entre septiembre y octubre con la masiva celebración de Dusshera. Los nueve días dedicados a la victoria del bien sobre el mal llenan las calles de procesiones y teatro tradicional. Te contamos donde celebrarlo.
Ⓒ Brian Glantz
El Navratri de septiembre-octubre marca las nueve noches en que se libra la batalla del bien contra el mal. En el norte de India coincide con el festival de Dusshera. Cada noche se representa una parte del Ramayana en teatros al aire libre conocidos como Ramlila. La última noche culmina con la quema de los diablos Ravana, Kumbhakarna e Indrajit. Según el Ramayana, ellos habían secuestrado a Sita, la mujer de Rama, quien tuvo que ir hasta la isla de Sri Lanka a salvarla junto con su hermano Laxman y el rey de los monos Hanuman. La quema de las efigies en una fiesta que reúne a toda la comunidad. El escenario de Old Delhi, ante el fuerte Rojo, y la representación del Ramayana en el fuerte de Ramnagar, en el antiguo palacio del Maharaja de Varanasi son algunos de los escenarios más famosos de la India. Asimismo, la UNESCO ha reconocido la singularidad del Ramlila de Kumaon en Uttarkhand.
Ⓒ Ankit Gupta
Paralelamente, en la India oriental se celebran los 5-6 días de Durga Pooja. La mayor celebración de Bengala Occidental pone a Kolkata en plena ebullición. Si Rama venció al diablo Ravana, Durga hizo lo propio con Mahishasur, librando al mundo de la encarnación del mal. Durante los días de celebración en honor a Durga, se sacan efigies en procesión por la ciudad para terminar con la ofrenda de las imágenes frente al agua del río Hoogly, una de las ramas del Ganges al desembocar en el Golfo de Bengala.
Ⓒ Soumyash
Otro destino que no te puedes perder durante el festival es la ciudad de Mysore. En el estado de Karnataka, los maharajás solían celebrar este festival con una gran procesión de la diosa Chamundeshwari a lomos de un elefante. Esta tradición real continua, acompañada de procesiones de antorchas. En Mysore, Dasara se ha convertido en un verdadero festival de cultura; los auditorios de la ciudad se llenan durante diez días de conciertos y actuaciones de danza y el Palacio de Mysore luce espectacular con su iluminación nocturna.