Internet ha marcado un antes y un después en la historia de la humanidad. Y si hace algunos años todavía podíamos poner en duda esta frase (¡¿cómo vamos a comparar este invento con la escritura o la electricidad!?), hoy en día, y con la aparición de la web 2.0 está claro que Internet ha cambiado el mundo. ¿Y qué hace una afirmación tan rotunda en un blog de viajes a India? ¿Acaso no estás aquí buscando información sobre tu próximo destino? Lo dicho. Empiezas a confeccionar tu viaje 2.0.
El ciclo de viaje 2.0 no difiere mucho del sistema tradicional. Antes, la inspiración surgía tras una entretenida charla entre amigos y hoy…, hoy nos dejamos guiar por los blogs de viaje y por lo que nuestros amigos comparten en las redes sociales (¡y todavía hay quien cree que India solo es un país pobre!… desde que sigo a Taj Hotels y Oberoi Resorts mi sueño es celebrar mi luna de miel en India).
Con tanta información que tenemos disponible, llega el tiempo de decidirnos. Barajamos los distintos destinos: ¿India, Sri Lanka o Bután…? Y si de este último sabes muy poquito, siempre puedes bucear entre las recomendaciones reales de los viajeros, que ya han estado allí.
Y cuando el rumbo ya está claro, también puedes servirte de Internet: para encontrar una agencia de viajes especialista en destino, hacer una reserva o consultar de nuevo el límite del equipaje de mano, ¡no vaya a ser que finalmente te permitan llevar más ropa y tú no lo sepas!
Durante el viaje, Internet también está presente. Dime cómo te sientes en esta playa de Sri Lanka (chiringuito con WIFI, qué gozada), manda una foto del Taj Mahal al atardecer (tu familia la verá a la hora de comer) y cuando vuelvas a casa, comparte tus aventuras en la web 2.0. Con esto, llegarás a cerrar el ciclo del Viaje 2.0, tú también partiste de experiencias de los demás cuando por primera vez pensaste en viajar a Asia.
En los últimos años el número de plataformas que recogen opiniones de los usuarios ha crecido desenfrenadamente. Si a eso añadimos la pasión que nos despierta el mundo de los viajes, la ecuación es puro éxito. Lo saben muy bien los que han convertido una idea sencilla en una empresa gigante. Y ahora, gracias a Internet, lo sabemos todos.