El Mahābhārata es la epopeya más antigua del mundo, el poema épico más largo de la historia, más aún que la Biblia o las obras completas de Shakespeare.
Su extensión, su profundidad, su caótica estructura, sus múltiples lecturas y sus innumerables matices hacen prácticamente imposible contarlo en pocas palabras, como nos proponemos hacer ahora…
Su nombre proviene del sánscrito: ‘maha’ (gran) y ‘bhārata’ (humanidad). Se suele traducir por ‘la gran historia del pueblo de India’ y, por extensión, de toda la humanidad.
Argumento.
Muy resumidamente, cuenta la historia de rivalidad entre dos grupos de primos. Los 5 hijos del rey Pandu o ‘pandavas’ y los 100 hijos del hermano de Pandu, los ‘kauravas’.
Según los historiadores, se basa en hechos reales sucedidos alrededor del año 3.000 a. C (aunque otros lo ubican en torno al siglo VI a.C).
Con ese hilo conductor, se narran multitud de historias paralelas, de hecho otros grandes poemas sagrados para el hinduismo como el Bhagavad-gita o el Ramayana forman parte de él.
Son historias de guerra y lucha entre el bien y el mal, de confrontación por la tierra, de amor, traición y venganza, de sabios, dioses y demonios. Historias algunas de una fantasía bellísima y sorprendente, cómo sólo la creatividad india puede concebir. De cada historia, como de la mitología de cada pueblo, se desgranan enseñanzas para la vida que se han transmitido de generación en generación.
Recopilación de la historia.
Fue alrededor del año 400 a.C. cuando se empezó a dar forma al poema originario, agrupando distintas historias, leyendas y genealogías de la tradición oral. Hasta nuestras manos llega hoy dividido en 18 libros (llamados ‘parvan’), aunque hay distintas versiones según los manuscritos utilizados.
No tiene un autor único conocido, sino que fue moldeado con el paso del tiempo. Sin embargo, se considera a Krishna Dvaipayana Vyasa como el responsable del meritorio trabajo de compilación y organización de tan compleja historia.
El propio Mahābhārata cuenta cómo el dios Ganesh (el dios con cabeza de elefante) aceptó escribir el manuscrito bajo el dictado de Vyasa, con la condición de que lo hiciera de seguido, sin una pausa en su recitación.
Esta es la explicación popular de por qué la imagen de Ganesh en la iconografía tiene roto el colmillo izquierdo: en cierto momento le falló la pluma y, al no poder parar su escritura, se arrancó la punta del colmillo para poder seguir escribiendo, utilizando su sangre como tinta.
Habría mucho que hablar y contar sobre esta historia. Seguramente habrá ocasión de seguir profundizando en futuros artículos.
Sobre el autor: David Martín es colaborador de Sociedad Geográfica de las Indias. Fascinado por India, sus gentes y su diversidad, David colabora con Sociedad Geográfica de las Indias desde 2008, haciéndolo compatible con su trabajo en organizaciones como Unicef o Amnistía Internacional. Con nosotros ha dirigido la estrategia de comunicación y redes sociales hasta 2011 y actualmente colabora aportando una visión humana, transformadora y comprometida, asegurando que un viaje exclusivo y de alta calidad sea compatible con una experiencia enfocada al descubrimiento y el respeto por las personas y las costumbres locales. Para más información: [Quiénes somos]