Escrito por: Gemma Raquel García @gemmaraquel
Gaudí se quedaría de piedra si conociera el Rockgarden.
Un humilde empleo, como inspector de caminos, y una bici, pueden ser suficientes para concebir una joya arquitectónica. Nek Chand (1924) aún hoy cautiva admiración en su país natal, la India, por un jardín de piedra, que puso en pie bajo esos dos únicos supuestos.
Su familia llegó a Chandigarh en el momento oportuno. Cuando el arquitecto suizo Le Corbusier estaba acometiendo la reestructuración de la ciudad por encargo de Nehru, el primer político en gobernar una India independiente. La consigna era crear una utopía. La primera ciudad india con un plan integral arquitectónico. Carreteras bien demarcadas. Calles cuadriculadas. Un lago artificial. Y un carril bici.
© Fernando Stankuns