Cómodo, económico, el mejor medio para conocer a los cingaleses y acceder a las vistas más espectaculares: viajar en tren por Sri Lanka proporciona estas experiencias y más.
Escrito por: Esther Pardo
Escrito por: Lorena Pérez
Muchos ven la India como un país lleno de tradiciones que, a pesar de su empeño, no llega a ponerse al nivel de los países más desarrollados. Aunque no les falta razón, es necesario reconocer que India está despertando e intentando avanzar como ya hicieron otros de sus vecinos asiáticos hace años. Y si en una cosa ha evolucionado es en su avance tecnológico: los teléfonos móviles y el software indio están abriéndose paso, no solo dentro de su país, sino también en los países occidentales.
Desde principios de los 90, la industria del software de India ha experimentado un crecimiento exponencial y constituye actualmente más del 60% de su PIB. Este país cuenta con una excelente infraestructura para la producción de software y otros servicios relacionados, permitiéndole tener como principal cliente a Estados Unidos, seguido del sudeste asiático y Japón. Los gigantes informáticos del país, como Infosys, Intex o Arthur Andersen, siguen ampliando sus operaciones y mercados y se estima que en 2015 la industria India ha alcanzado ya los 155.000 millones de dólares -aunque aún no existen datos oficiales-, sin duda todo un logro en esta época de regresión globalizada. Pero, ¿si las inversiones e industrias del resto del mundo están en sus épocas más bajas, cómo consigue expandirse de esta manera el software de India?
Aunque muchos pueden pensar que la clave del éxito del software de India es el bajo coste de producción, en realidad son muchos los factores que lo han propiciado. Uno de los principales es la gran cantidad de ingenieros y profesionales cualificados que existen entre la población de India, además, se han visto beneficiados por las grandes inversiones en educación y especialización que ha realizado el gobierno en los últimos años y por la creación de grandes y modernos parques tecnológicos como el de Bangalore o Nueva Delhi.
Por otro lado, otra de las claves del éxito del software de India lo encontramos en la posibilidad de crear empresas con un capital inicial más bajo que en otros países, lo que ha propiciado que emprendedores con talento hayan podido arrancar sus negocios tecnológicos y que otras grandes firmas hayan trasladado allí su producción. Por último, otro de los factores principales es, sin duda, el notable dominio del inglés que tiene la gente preparada de India, al contrario de lo que otros países en vías de desarrollo.
De esta manera, podemos asegurar que las nuevas tecnologías han llegado a India para quedarse, desplazando poco a poco a otros sectores tradicionales que hasta hace algunos años eran el motor del país, como las manufacturas o la agricultura. El software de India ha despegado y poco a poco se consolida como pieza clave en su economía.
Escrito por: Alberto Piernas
Cuando pensamos en realizar un viaje romántico a la India los motivos para escoger este país como destino responden a diversos estímulos: sus aromas a especias, el colorido de sus bailes, la belleza de sus paisajes o, también, el encanto de estas bellas historias de amor de la cultura hindú que, aunque quizás aún no conozcas, se convertirán en la mejor inspiración durante esos atardeceres frente al Taj Mahal o una noche en las mágicas marismas de Kerala.
Shah Jahan y Mumztal Mahal: Una de las más bellas historias de amor de la cultura hindú reside en su monumento más famoso: el Taj Mahal, mausoleo que en 1631 el príncipe Shah Jahan elevó en honor de su difunta esposa, Mumtaz Mahal. Más de veinte años de construcción que dieron como resultado una de las Maravillas del Mundo y la leyenda de un romance aún confundido entre realidad o ficción por los viajeros.
Baji Rao y Mastani: Aunque algunos aspectos de esta historia son inciertos, su impacto en la cultura hindú es tal que muchos la consideran como una de las más importantes de su folclore. Uno de los protagonistas, Baji Rao, fue un respetado general del siglo XVIII que ayudó a conquistar parte del norte de la India. Fue durante una celebración que quedó prendado de la joven Mastani, una cortesana de ascendencia árabe a la que erigió el Mastani Mahal, en Pune. Tras la muerte de Baji Rao en combate en 1740, Mastani cometió un ritual suicida con tal de unirse a su amado. Pura tragedia hindú.
Bappaditya y la princesa solanki: Uno de los reyes del imperio rajput, al norte de la India, visitó una vez el reino vecino de Solanki, donde conoció a una bella princesa con la que se citó en más de una ocasión junto a un columpio de las profundidades del bosque. De hecho, incluso organizaron una boda falsa en la que emularon a Krishna y Radha como prueba de sus deseos. Sin embargo, debido a diferencias entre ambos reinos, Bappaditya se casó con otras mujeres, si bien nunca pudo olvidarla.
Shiva, Paravati. . . y Kamadeva: El dios hindú del deseo se conoce como Kama, de ahí el nombre de Kamasutra. Esta encarnación del romance se transportaba sobre un loro, lucía cubierto de flores y disparaba flechas de amor, con tan mala (o buena) suerte que interrumpió con una de ellas la meditación de Lord Shiva. Éste, tras incinerar a Kama con su tercer ojo, se percató de que la flecha había hecho efecto y, como tal, cayó rendido en los brazos de la diosa Parvati, de cuya unión nacería el famoso dios con cabeza de elefante al que todos conocen como Ganhesa. Una de las historias más curiosas de la mitología hindú.
Conocer estas bellas historias de amor de la cultura hindú nos trasladan a los exóticos escenarios de la India donde dioses, príncipes y cortesanas dieron pie a esos romance que siguen inspirando a viajeros, a Bollywood, al mundo entero.
La etapa 6 de Pekín Express 2016 abandonará la costa oeste del país para adentrarse hacia la ciudad de Mysore, una población repleta de grandes complejos palaciegos que nos mostrarán otra cara de la India más conocida.
Escrito por: Enric Donate
Una comida cotidiana en india se compone de diversos platos tanto en familia como en el restaurante. Al pedir en un restaurante indio, en India o en cualquier lugar del mundo, conviene recordar esta forma de comer, para no quedarnos con hambre ni desperdiciar la comida.
Cuando hay que pedir en un restaurante indio, lo mejor es que cada persona elija un plato y se comparta la comida. Si solo comes tu plato, te va a parecer una alimentación muy poco variada. Recuerda que debes probar la gran variedad de panes indios y que no es necesario pedirlos al inicio de la comida, sino que se van preparando al momento según lo requiere el cliente.
Si eres de los que no soportan compartir, una buena opción es el biryani, un plato de arroz con pollo o cordero que se cocina durante horas con una mezcla secreta de especias. Si quieres evitar el picante, el pulao es una preparación similar sin masala. Otra opción para comidas ligeras unipersonales son los snacks. Los indios están muy acostumbrados a comer en la calle y han creado una gran variedad de platos para picotear. Las samosas, las pakoras, las dosas o los idlis se sirven en los restaurantes y aunque son platos para el desayuno o un tentempié entre horas, muchas veces te parecerán perfectos para matar el hambre en lugar de una gran comilona.
*Nuestro consejo: Especifica siempre el nivel de picante que toleras. Aclara varias veces no spicy si el chile no es lo tuyo.
Una opción al pedir en un restaurante indio suele ser el thali. Un thali es un menú degustación a la manera india. Tradicionalmente se servía sobre una hoja de banano y en su versión más reciente en una bandeja de acero inoxidable. Encontrarás achar (conserva, ojo que es muy intensa), legumbres, a menudo lentejas, y uno o dos platos de verduras sin salsa y un curry que varían según las regiones y la temporada. En el norte encontrarás recetas como el aloo jeera (patatas con comino), bhindi masala (ocra) o bainghan bharta (berenjenas); en el sur seguro que habrá sambhar (sopa a base de lentejas) y rasam (sopa a base de zumo de tamarindo).
Cuando el restaurante es vegetariano se completa con un plato de paneer (queso fresco), mientras que si es no vegetariano habrá pollo en el norte y pescado en el sur. El thali suele incluir un postre y una porción de yogur. Es una buena idea para familiarizarse con la cocina india, pero si lo pides siempre, te puede resultar un poco repetitivo.
*Nuestro consejo: Siempre prueba los platos del thali antes de darles un bocado. Al cocinarlos para todo el restaurante es más difícil que respeten a quienes prefieren la comida menos o nada picante.
Pekín Express 2016 deja atrás los recorridos por Sri Lanka de la etapa 4 para comenzar a explorar la India. Un nuevo país, una nueva sociedad y un sinfín de nuevos retos a los que enfrentarse darán comienzo en esta etapa 5. ¿Cómo se las arreglarán las parejas para desenvolverse en este país?
Aunque el recorrido que seguirán en esta nueva etapa no está nada claro y el avance del programa poco nos ha mostrado sobre cuáles serán los lugares que podremos conocer en la próxima ruta, podemos aventurarnos a afirmar que lo más probable es que el comienzo se realice en la región de Kerala, ubicada en la costa sudoeste de la India.
Nexo de unión en la gran parte de viajes que combinan Sri Lanka e India, la región de Kerala cuenta con infinidad de atractivos que hacen de ella uno de los “imperdibles” del país. Entre ellos destacan por encima del resto sus backwaters: casi mil kilómetros de canales, lagos y deltas que componen una red navegable con infinidad de pueblos de pescadores y hoteles con encanto. También destaca en la región de Kerala la ciudad de Fort Kochi dividida entre islas y tierra firme y las bellas playas que componen la zona de Varkala, con sus mágicas puestas de sol.
Aún no sabemos qué ruta seguirán los concursantes, ¿nos permitirán disfrutar de la región de Kerala o realizarán una ruta por la costa oeste del país? Tendremos que esperar hasta el martes para resolver estas incógnitas, lo que si está claro es que ya teníamos ganas de llegar a India y descubrir, poco a poco, todo lo que este bello país puede ofrecernos.
Ya ha concluido la etapa 5 de Pekín Express 2016 y como nos aventurábamos a adelantar en el avance, los concursantes se han tenido que enfrentar a una larga ruta por la región de Kerala. La carrera arrancaba en la bella playa de Varkala, punto más al sur de la ruta, para poco a poco ir ascendiendo por la costa de India hasta llegar a la meta situada en la población de Thrissur, a más de 250 kilómetros de distancia del punto de partida.
En la salida las parejas ya empezaron a mostrarnos un poco más de la cultura india realizando un ritual de purificación bali -típico de la religión hinduista– y vistiendo un traje característico de la región como es el dhoti, imprescindible entre la vestimenta para visitar los templos del país. Tras ello, los concursantes iniciaron la carrera recorriendo 100km hasta Alleppey, donde disfrutamos de los backwaters de la población, con sus casas flotantes, templos y todo tipo de lugares destacados: ¡Kerala es el sitio perfecto para viajar en familia!
Desde allí las parejas siguieron su ruta hasta Chellanam, donde pudieron probar de la mano de los locales algunos platos típicos de la gastronomía india, para después continuar hasta la ciudad de Kochi y terminar la ruta en Thrisur. Podemos decir que esta ha sido una de las etapas más duras de la temporada por el cambio de cultura y de forma de entender la vida de la población india, muy diferente a la de los habitantes de Sri Lanka.
A partir de hoy descubriremos a cada paso nuevas curiosidades de esta cultura milenaria que nos sorprenderán. ¡Ah! Por cierto, hemos podido ver durante todo el programa como algunos aventureros llevaban un punto rojo en la frente ¿aún no sabes qué significa el “tercer ojo”? Seguro será un dato importante para próximas etapas. ¡No te lo pierdas!