En el año 2007, el reputado artista Jonathan Harris cogió su cámara de fotos y decidió viajar hasta Bután para intentar descubrir y retratar eso que el gobierno del país había bautizado como “Felicidad Interior Bruta”, un nuevo concepto que atrajo desde el primer momento la atención internacional de todos los demás países del mundo. Su proyecto Globos de Bután es el resultado de este viaje.
Escrito por: Lorena Pérez
La denominada “Felicidad Interior Bruta” convirtió en 1972 a Bután en la primera región del globo en cuantificar, cada año, cuál es el grado de bienestar que sienten sus habitantes y equiparar su importancia a la del Producto Interior Bruto. Este concepto tan peculiar ha atraído desde entonces a miles de personas que desean descubrir cómo se sienten los butaneses y cuáles son esos deseos e intereses que tanto importan al gobierno de su país.
Uno de los viajeros que mejor ha conseguido este propósito ha sido el polifacético artista estadounidense Jonathan Harris, de cuyo recorrido por tierras butanesas surgió el proyecto “Balloons of Buthan” (Globos de Bután). En él, según palabras del propio artista, trató de plasmar la felicidad de los habitantes del último reino del Himalaya, para lo que simplemente necesitó una buena idea, un rotulador y un montón de globos de colores.
Durante dos semanas, Harris recorrió Bután intentando captar el lado más social del concepto “Felicidad Interior Bruta”, dejando a un lado la seriedad con la que se trata este tema en el país. Para ello contó con la participación de 117 lugareños de entre 8 y 81 años de edad y de todos los niveles educativos, estatus social y profesión.
Para ahondar en el concepto de felicidad, a cada uno de ellos les realizó las mismas cinco preguntas: ¿quién eres?, ¿cuál es tu recuerdo más feliz?, ¿qué harías si fueras el Rey de Bután?, ¿cuál es tu nivel de felicidad del 1 al 10? y, por último, ¿cuál sería tu mayor deseo?. Después, les entregó a cada uno de ellos el número de globos de Bután equivalente a su grado de felicidad y escribió su mayor deseo en el globo de su color favorito.
Todas estas interacciones quedaron reflejadas en cinco fotografías que Harris emparejó a cada una de las preguntas. De esta manera, consiguió contar la historia de su vida en imágenes: un retrato, una foto de la palma de sus manos, otra poniendo su cara más sonriente y divertida, una foto sosteniendo los globos equivalentes a su grado de felicidad y la última con el globo en el que se refleja su mayor deseo.
La última noche que pasó en Bután, Harris volvió a inflar todos los globos de los deseos y los colgó junto a las cientos de banderas de oración budistas que coronan la montaña sagrada de Dochula (Timpu), con la clara intención de que todos esos deseos llegasen a convertirse en realidad.
El resultado final del proyecto es esta magnífica narración multimedia en la que se puede conocer de mano del propio artista cuál es la historia que envuelve todas esas fotografías de estudiantes, agricultores, monjes y vendedores butaneses.
excelente articulo que gente linda y dan ejemplo de como vivir en paz y alegres felicitacione
No sabría como como empezar maravilloso país gente encantadora nunca pensé que me gustara tanto felices alegres contentos no dejéis de visitarlo unos templos budistas maravillosos …